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La tarta de queso, ya sea en estilo neoyorquino o italiano, es un postre ligero y delicioso. Debido a que contiene una buena cantidad de leche o crema además de queso blando, puede ser difícil saber cuándo está lista. Sin embargo, hay varias cosas que puedes hacer para determinar si está lista, por ejemplo, verificar la temperatura, sacudir suavemente el molde y tocar la superficie de la tarta.

Método 1
Método 1 de 4:

Sacudir la tarta

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  1. Mientras la tarta de queso todavía esté en el horno, utiliza una manopla para sacudir con cuidado el molde. No lo hagas con demasiada fuerza cuando la tarta todavía esté caliente o se podría puede romper. Solo sacude un poco el molde. Ten cuidado y evita que caiga agua en el molde si has horneado la tarta de queso con un baño María. [1]
  2. Si sacudes el molde y una parte de 5 cm (2 pulgadas) del centro se mueve ligeramente, entonces la tarta de queso estará lista. Si hay un parte grande que se mueve, si el líquido se rompe en la superficie o si se derrama por los bordes del molde, entonces quiere decir que la tarta de queso todavía no ha terminado de cocinarse. Hornéala por otros 5 minutos más o menos antes de volver a revisarla para ver si está cocida. [2]
  3. Si utilizaste una buena cantidad de crema agria en la tarta de queso, se moverá más que una tarta que esté rellena principalmente de queso crema o requesón. Habrá una mancha blanda y suave en el centro, así que busca los bordes inflados y ligeramente dorados que te indicarán cuándo está lista la tarta de queso. También ten en cuenta que el centro se seguirá cocinando y se pondrá ligeramente duro a medida que se enfríe. [3]
    • Si sigues cocinando la tarta de queso hasta que el centro esté duro y no se mueva, entonces se horneará demasiado tiempo.
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Método 2
Método 2 de 4:

Tocar la superficie

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  1. Antes de tocar la tarta de queso, lávate bien las manos con agua tibia y jabón. Enjuaga tus manos a fin de eliminar los residuos de jabón y sécatelas completamente.
  2. Toca con cuidado la superficie del centro de la tarta de queso con uno o dos dedos. ¡No presiones demasiado! Querrás verificar el punto de cocción en el centro en vez de revisar cerca de los bordes. [4]
  3. Si la superficie de la tarta de queso tiene un poco de flexibilidad pero la sientes dura, entonces está lista. Si tu dedo se hunde en la tarta o si sale con la mezcla, entonces necesitará más tiempo en el horno. Hornea durante otros 5 minutos antes de volver a revisarla. [5]
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Método 3
Método 3 de 4:

Ver la tarta

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  1. Puedes saber que una tarta de queso está lista cuando hay un anillo de 1,3 cm (½ pulgada) alrededor de los bordes que se empieza a poner dorado y a hincharse ligeramente en el molde. El relleno debe lucir pálido en vez de dorado. No dejes que se siga cocinando o al final podrías hornear demasiado la tarta. [6]
  2. Si los bordes están líquidos en vez de fijos y duros, entonces la tarta de queso todavía no estará lista. Solo una parte de 5 cm (2 pulgadas) del medio todavía se debe mover y no estar dura cuando la tarta de queso esté perfectamente horneada. [7]
  3. Una vez que la superficie de la tarta de queso no brille, ¡ya estará lista! Asegúrate de que toda la tarta, incluyendo la parte blanda del medio, haya perdido su brillo antes de retirarla del horno. [8]
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Método 4
Método 4 de 4:

Verificar la temperatura

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  1. No querrás esperar varios minutos mientras el termómetro determine la temperatura, por lo tanto, escoge uno de lectura instantánea. Asegúrate de limpiarlo después de cada uso. [9]
    • En ocasiones deberás calibrar el termómetro a fin de asegurarte de obtener una lectura precisa. Para hacerlo, llena una olla pequeña con agua y ponla a hervir. Toma la temperatura del agua, la cual debe ser 100 °C (212 °F). [10]
    • Gira el perno hexagonal que está en la parte inferior de un termómetro analógico a fin de calibrar la temperatura si es incorrecta. Consulta las instrucciones del fabricante para calibrar un termómetro digital. [11]
  2. Los bordes podrían estar más calientes que el centro, por lo tanto, para saber si la tarta está lista, tendrás que revisar la temperatura en el medio. No hundas el termómetro hacia el fondo del molde, simplemente ponlo a la mitad de la tarta. [12]
    • Ten en cuenta que pegar un termómetro a la tarta de queso podría hacer que se agriete, por lo tanto, trata solo de probar la temperatura una vez en vez de hacerlo varias veces. Si debes probarla más de una vez, inserta el termómetro en el mismo orificio que utilizaste la primera vez a fin de minimizar el agrietamiento. [13]
  3. Una vez que el medio de la tarta de queso alcance 66 °C (150 °F), ya estará lista. Sácala del horno y deja que se enfríe por completo en una rejilla de alambre. Si todavía no está lista, vuelve a ponerla en el horno durante unos 5 minutos y después revísala de nuevo para ver si ya está lista. [14]
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Consejos

  • Procura no abrir la puerta del horno mientras la tarta de queso se esté cocinando. Si lo haces, podrías reducir la temperatura y provocar que la tarta se hornee de forma irregular. [15]
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Advertencias

  • No pruebes el punto de cocción de una tarta de queso metiendo un palillo de dientes o un cuchillo. Así no obtendrás una evaluación precisa y puedes provocar una grieta en ella. [16]
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