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El dolor de rodilla puede impedir que duermas bien por la noche, pero hay muchas opciones para aliviarlo. Reduce la inflamación que cause dolor recurriendo a la terapia caliente o fría para calmar las articulaciones de la rodilla y quitarle la presión. Habla con el médico sobre los tratamientos para el dolor, incluyendo analgésicos de venta libre y suplementos. Puedes mejorar la condición de las rodillas en general haciendo ejercicio, comiendo cosas saludables y tratando las lesiones de inmediato para prevenir cualquier daño.

Método 1
Método 1 de 3:

Usar remedios caseros

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  1. Envuelve una bolsa helada de gel flexible en una toalla delgada y colócala alrededor de la rodilla. Asegúrate de tener la rodilla entera cubierta para obtener mejores resultados. Mantén la compresa ahí de 15 a 20 minutos para reducir el dolor y la inflamación. Luego, espera más o menos una hora y vuelve a ponerla. Hazlo de 3 a 4 veces al día hasta que el dolor se calme.
    • No dejes la compresa helada sobre la rodilla por más de 20 minutos, pues puede causar daños a la piel y los nervios.
    • Una bolsa de verduras congeladas también servirá como una compresa helada para la rodilla.
    • En general, el frío puede calmar más el área que el calor, sobre todo si hay alguna hinchazón.
    • Alterna la terapia caliente y fría a lo largo del día. Trata de aplicar una compresa helada por 10 minutos, luego continúa con la compresa caliente por 10 minutos.
  2. Coloca una almohada firme debajo de la rodilla hinchada de una manera que te permita echarte cómodamente. Si puedes dormir de esta manera, deja la almohada en esa posición toda la noche para aliviar el dolor de la rodilla. Si no es así, eleva la rodilla por 20 minutos o más antes de que vayas a dormir para reducir una inflamación que cause dolor. [1]
    • Elevar la rodilla a lo largo del día también será beneficioso. Si el armazón de la cama es ajustable, ajústalo para elevar ambas rodillas al mismo tiempo.
  3. Cuando vayas a dormir, colócate de modo que tengas las piernas extendidas y las rodillas ligeramente dobladas. Esta medida evitará que pongas tensión en las rodillas, lo cual puede empeorar el dolor. Para mantenerte en una posición derecha, trata de dormir con una almohada corporal larga a fin de mantener las piernas en su sitio.
    • No es necesario que mantengas las piernas completamente derechas, eso sería antinatural y probablemente incómodo.
    • También puedes comprar en línea una almohada de espuma de memoria para las rodillas a fin de apoyarlas por la noche. [2]
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Método 2
Método 2 de 3:

Tomar medicamentos para calmar el dolor

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  1. Pregúntale al médico si debes tomar medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) para calmar el dolor de rodilla por la noche. Los AINE alivian el dolor y reducen la inflamación, lo cual hace que sean doblemente efectivos para calmar el dolor de las articulaciones. De manera alternativa, el médico puede recomendarte que tomes paracetamol, la alternativa principal para aliviar el dolor para las personas que no pueden tomar AINE. [3]
    • Los medicamentos AINE incluyen ibuprofeno, naproxeno y diclofenaco.
    • Sigue las instrucciones de dosificación específicas y habla con el médico acerca de cuánto tiempo debes tomar los AINE. Estos medicamentos deben tomarse por períodos breves, no para tratar el dolor crónico de rodilla.
    • El médico puede prohibirte que tomes AINE si estás embarazada, si has tenido úlceras estomacales, si tienes problemas cardíacos, hepáticos o renales, o si tomas otros medicamentos que puedan interaccionar con estos.
    • Los AINE pueden causar indigestión, dolores de cabeza, vértigo, somnolencia o reacciones alérgicas.
    • Si ya tomas medicamentos AINE, pero no son efectivos, trata de tomar una opción de acción lenta o de una dosis cada “12 horas”.
  2. Si no deseas tomar un medicamento AINE oral o no puedes por razones médicas, pregúntale al médico acerca de los analgésicos tópicos que contengan AINE. Estas cremas, geles, espráis y parches se pueden poner directamente en la rodilla adolorida por la noche, antes de que vayas a dormir. El AINE activo atravesará la piel para dirigirse directamente al área dolorosa, proporcionando de manera potencial alivio para el malestar.
    • Aplica el analgésico tópico como te lo indique el médico o el farmacéutico de 2 a 4 veces al día.
    • No combines AINE orales y tópicos sin la aprobación específica del médico.
    • Los analgésicos tópicos pueden producir enrojecimiento, comezón y alguna otra irritación de la piel.
  3. Pregúntale al médico si hay algún suplemento natural que pueda calmar el dolor de rodilla. Por ejemplo, se ha demostrado que la cúrcuma, el jengibre y los ácidos grasos omega 3 reducen la inflamación asociada a la artritis reumatoide, la osteoartritis y los trastornos relacionados con la artritis. El médico podrá asesorarte sobre los posibles efectos secundarios o las interacciones con otros medicamentos. [4]
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Método 3
Método 3 de 3:

Prevenir el dolor de rodilla

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  1. Si experimentas un trauma o un golpe en la rodilla, visita a un médico lo más pronto posible para evaluar el daño y recibir tratamiento apropiado. Dependiendo de la gravedad de la lesión, es posible que sea necesaria la cirugía o la terapia física para que la rodilla se cure adecuadamente. En el caso de lesiones menores, dejar descansar la pierna y poner hielo en la rodilla en intervalos de 20 minutos varias veces al día es clave para una curación rápida. [5]
    • Sigue las indicaciones del médico en cuanto al tiempo de curación y las actividades seguras durante el período en el que la rodilla esté lesionada.
    • Si la rodilla se traba, cede o se hincha significativamente, visita al médico de inmediato. Si se trata de un agravamiento menor, puedes esperar un par de días para ver si mejora por sí solo.
  2. La mejor manera de aliviar el dolor de rodilla es fortalecer los músculos que están alrededor, lo cual reduce la presión de las articulaciones de la rodilla. Enfócate especialmente en ejercicios que fortalezcan los cuádriceps y los glúteos, así como los que estiran los tendones de la corva. Haz de 8 a 12 repeticiones de estos ejercicios aproximadamente de 2 a 3 veces a la semana para ver resultados. Los siguientes son algunos ejercicios que debes incluir: [6]
    • sentadilla en silla (es esencialmente una sentadilla básica que se hace sujetando el respaldo de una silla a modo de soporte)
    • elevación de talones
    • elevación de caderas (debes acostarte boca arriba, levantar las caderas del suelo y bajarlas lentamente)
    • levantar una pierna estirada (mientras estás sentado o echado)
  3. Mejora la dieta añadiendo productos frescos, fibra, grasas saludables, proteína magra tanto como sea posible. Estos alimentos ayudarán a reducir la inflamación del cuerpo y, al mismo tiempo, promoverán la pérdida de peso que evitará la tensión en las rodillas. Evita los alimentos procesados y salados. Opta por los siguientes productos: [7]
    • pescados que contenga ácidos grasos omega 3 (como salmón y atún)
    • verduras verdes ricas en fibra (como col rizada, espinacas y brócoli)
    • bayas ricas en antioxidantes (como moras, fresas y arándanos)
    • aceite de oliva extra virgen (el cual contiene grasa saludable para el corazón)
    • frijoles (como frijoles pintos, frijoles rojos o garbanzos, los cuales son ricos en fibra, proteínas, ácido fólico y minerales)
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Consejos

  • Durante el día, trata de evitar actividades desencadenantes como levantar pesas o saltar.
  • El clima frío, húmedo o ventoso puede empeorar el dolor de rodilla.
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Advertencias

  • Aunque este artículo provee información concerniente al dolor de rodilla, no se debe tomar como un consejo médico. Siempre consulta con un médico acerca de la mejor manera de tratar el trastorno específico que tengas.
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