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El agua es esencial para la vida, para combatir la deshidratación y para ayudar al cuerpo a eliminar las toxinas y mejorar las funciones orgánicas. Por años, los investigadores y los expertos de la salud han recomendado beber 8 vasos de 237 ml (8 oz) (aproximadamente 2,5 litros) de agua todos los días para mantener la salud. Aunque el número no es precisamente una prescripción estricta, [1] hay ciertas ventajas en beber más agua todos los días. Algunos estudios incluso sugieren que aumentar tu consumo de agua diario puede ayudarte a vivir más. [2] Encontrar formas de beber más agua puede ayudar a que te sientas más saludable y más hidratado cada día.

Método 1
Método 1 de 2:

Hacer del consumo de agua una prioridad

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  1. 2 litros (0,5 galones) es alrededor de 8 vasos de agua. Tener un recipiente de ese tamaño puede ayudarte a recordar beber el agua necesaria todos los días.
    • Si tienes una botella vacía de gaseosa de 2 litros, llénala con agua y ponla en el refrigerador. Bebe toda la botella de agua en el curso del día.
    • Si no bebes toda la botella de agua cada día, es probable que no estés recibiendo suficiente agua.
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    Claudia Carberry, RD, MS

    Diestista registrada
    Claudia Carberry es dietista registrada que se especializa en trasplantes de riñón y que asesora a pacientes a perder peso en la Universidad de Arkansas para Ciencias Médicas. Es miembro de la Academia de Nutrición y Dietética de Arkansas. Claudia recibió una maestría en nutrición en la Universidad de Tennessee Knoxville en 2010.
    Claudia Carberry, RD, MS
    Diestista registrada

    ¿Sabías qué? La cantidad de agua varía según la altura, el peso, los niveles de actividad y otros factores. Para saber a ciencia cierta si consumes suficiente agua, verifica si tu orina es transparente o amarillo pálido. En ese caso, significa que te estás hidratando adecuadamente.

  2. Prepárate para beber un vaso de agua cada mañana al levantarte, un vaso al llegar a casa del trabajo o de la escuela y un vaso en la noche, antes de ir a dormir. Estos son tres de los ocho vasos diarios recomendados. Puedes hacer un cuadro del consumo de agua diario para ayudarte a empezar. Después de un tiempo, sentirás la práctica como una segunda naturaleza.
    • Beber agua en la mañana también ayuda a iniciar tu metabolismo y es una manera refrescante de levantarte cada día. [3]
    • También hay botellas de agua en el mercado con sistemas de conteo en el diseño. Por ejemplo, algunas botellas tienen un pequeño dial que gira cada vez que tomas 237 ml (8 oz). Este mecanismo estimula a un mayor consumo de agua.
  3. Otro hábito que debes cultivar es beber un vaso de agua mientras haces otro trabajo, ya sea en la computadora o viendo televisión. [4]
  4. Hay muchas aplicaciones disponibles para tu teléfono inteligente que pueden ayudarte a mantener el registro de cuánta agua has bebido o proporcionarte recordatorios para que bebas más. Muchas son gratuitas, pero si pagas por una, quizás estés más motivado a usarla diariamente. [5]
  5. Lleva la botella a donde quiera que vayas. No solo reducirá el número de botellas desechables de agua que debas adquirir, sino que también puede motivarte a usar tu nueva botella.
    • Recuerda usar una botella de agua que no solo se vea agradable, se sienta agradable y mantenga el agua fría, sino también una que esté libre de bisfenol A y que se lave fácilmente.
  6. Los profesionales de la salud te aconsejarán frecuentemente que bebas más agua de lo normal (lo cual significa más de 8 vasos al día), dependiendo de los factores ambientales. Si vives en un clima caliente y seco, probablemente necesites beber más agua que alguien que vive en un clima ártico. Si haces ejercicios, necesitarás incluso más agua para mantenerte hidratado.
    • No esperes hasta estar sediento para beber agua, especialmente si haces una actividad física o si el clima es cálido. En el momento en que te sientes sediento, tu cuerpo ya está deshidratado. [6]
  7. Esto hará que estés más lleno antes de comer e incluso puede parar los antojos, ya que la sed suele confundirse con el hambre. [7]
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Método 2
Método 2 de 2:

Hacer que el agua sepa mejor

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  1. Las burbujas le dan al agua ordinaria una efervescencia adicional y, si bebes agua mineral con sabor, puedes incluso hacerle creer a tu cerebro que se trata de soda. [8]
  2. A medida que el hielo se derrite, puedes tomar sorbos de una botella de agua congelada todo el día. [9]
  3. Colocar rodajas de cítricos, de bayas o incluso de pepinos en el agua le dará un sabor ácido y fresco que hará que quieras más. [10]
  4. Puedes congelar casi cualquier jugo, cualquier puré de fruta o incluso cualquier café o té con sabor en una bandeja de cubitos de hielo. Cuando estén listos, saca unos cuantos cubos y añádelos a tu botella de agua. [11]
  5. Por cada vaso de agua que tomes, recompénsate a ti mismo con algo que te guste (como un pedazo de chocolate o una asignación de tiempo de televisión). [12]
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Consejos

  • Usa una botella de agua reutilizable. Es ecológica, es más barata y es mucho más elegante que una simple botella de plástico.
  • Siempre ten agua a la mano. Mantén las botellas de agua en el coche por si te encuentras con un tráfico inesperado o, aún peor, si tienes problemas con tu coche y te quedas atascado.
  • Mantén el agua fría. Estarás más propenso a tomar agua si no está caliente, especialmente durante el clima caliente.
  • Si estás sediento, bebe agua en vez de bebidas con sabor.
  • Puedes encontrar algunos saborizantes de agua sin azúcar para estimularte a beber agua. De manera alternativa, añade sabor a tu vaso de agua con fruta fresca o haz helados de fruta.
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Cosas que necesitarás

  • botella de agua de 2 litros (0,5 galones)
  • botella de agua reutilizable

Acerca de este wikiHow

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