Descargar el PDF Descargar el PDF

La muerte de cualquier familiar puede ser devastadora. Sin embargo, algunas personas crecen junto a sus primos desde la adolescencia hasta la edad adulta. Si eres muy unido a tu primo, es posible que sientas como si hubieras perdido a un hermano o a un mejor amigo. Ningún período de aflicción es fácil, pero puedes aprender a afrontar la pérdida de un primo siendo apacible contigo mismo y siendo paciente.

Parte 1
Parte 1 de 2:

Hacer duelo

Descargar el PDF
  1. Llora. Muchas personas asumen erróneamente que ignorar los sentimientos o “aguantarlos” hará que el dolor desaparezca de manera más rápida. Este es un mito común asociado al duelo. [1] No tengas miedo de llorar o de gritar, o de hacer cualquier cosa que creas que te ayude a afrontar la pérdida. Antes de que puedas superar la pérdida de un ser querido, primero debes hacer duelo.
    • Los niños y adolescentes suelen seguir el ejemplo de la reacción de los adultos en sus vidas. Si los adultos se entristecen abiertamente y muestran su dolor, los niños pueden sentirse más cómodos haciéndolo también. Sin embargo, si los adultos intentan tragarse los sentimientos o mantenerse fuertes, los jóvenes pueden pensar que llorar es inapropiado o un signo de debilidad. [2]
  2. Aunque ya hayas sufrido una pérdida antes, puedes reaccionar de manera distinta ante la muerte de tu primo, dependiendo de tu relación con él y de las circunstancias excepcionales que rodeen la muerte. Puesto que no hay una muerte normal, tampoco hay una respuesta ordinaria a la muerte. Las siguientes son algunas reacciones comunes a la muerte: [3]
    • Conmoción. Al principio puede ser difícil aceptar el hecho de que tu primo se ha ido. Puede que te sientas completamente adormecido y sin ningún dolor. Es posible también que discutas con los demás y que niegues la verdad. Puede que incluso tengas expectativas y esperanzas de que tu primo aparezca y aclare este malentendido.
    • Enojo. Puede que te sientas molesto y rencoroso después de la muerte de tu primo. Puede que sientas rabia y amargura hacia ti mismo, los profesionales médicos, Dios o incluso hacia tu primo por haberte abandonado.
    • Culpa. Puede que te sientas culpable de no haber podido evitar lo que pasó o de haber sobrevivido.
    • Tristeza. Esta es una de las reacciones más comunes ante la muerte. La tristeza puede incluir la sensación de que hay un agujero en tu vida, la soledad o la desesperanza. Puede que llores por horas.
  3. Después de la muerte de un familiar, todos se repondrán y harán duelo a su propio ritmo. Algunas personas pueden empezar a sentirse mejor en unas pocas semanas, mientras que para otras el proceso de duelo puede durar meses o más. Sé paciente contigo mismo y confía en que volverás a sentirte mejor en tu propio tiempo. [4]
  4. Durante este periodo de aflicción busca la compañía de los familiares y los amigos cercanos que puedan apoyarte a lo largo de este proceso. A menudo, es útil hablar de las emociones en vez de reprimirlas, pues eso puede hacer que la recuperación y el crecimiento después de una pérdida sea más difícil.
    • Escribir en un diario también puede ayudarte a liberar la emoción reprimida o los sentimientos confusos que experimentes después de la muerte de tu primo. Puedes escribir de los buenos momentos y los recuerdos felices que ambos compartieron. [5]
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 2:

Seguir con tu vida

Descargar el PDF
  1. Puedes hacerlo mediante la celebración de rituales como funerales o cremaciones. Asistir al funeral puede darte el cierre necesario y hacer que te des cuenta de que no eres el único que está de duelo.
    • Si tu familia no profesa ninguna religión ni celebra ceremonias conmemorativas, puedes encontrar otras formas significativas de conmemorar a tu primo. [6]
  2. Una vez que te hayas acostumbrado a la pérdida de tu primo, podrás seguir recordando con cariño el tiempo que pasaron juntos. Esto puede ayudarte a valorar el tiempo que pasaron juntos y a honrar su memoria enfocándote en las cosas positivas.
    • Incluso puedes empezar la tradición de celebrar el cumpleaños de esta persona cada año o soltar globos en ese día para mantener su memoria viva.
  3. Tu primo no querría que te hagas duelo por siempre. Debes vivir la vida. Aunque te parezca muy difícil en este momento, llegará el día en que no pienses en la pérdida tan a menudo o con tanto dolor. Entonces, podrás vivir por tu primo y hacerlo plenamente. [7]
    • Una sugerencia para vivir la vida al máximo puede ser aprovechar el tiempo que tienes en la tierra para ponerte objetivos nuevos. Crea una "lista de cosas que te gustaría hacer antes de morir" y empieza a tachar los elementos. [8]
  4. Todas las personas reaccionan a la muerte de maneras distintas. Si la muerte de tu primo hace que te aísles de los amigos y los familiares, que dejes de participar en la escuela o tener un buen desempeño en el trabajo, que te sientas muy deprimido o que consumas drogas o alcohol para afrontar la situación, debes ver a un profesional de la salud mental.
    • Un consejero o un psicoterapeuta puede ayudarte a encontrar maneras positivas de canalizar la aflicción y de afrontar la pérdida.
    Anuncio

Consejos

  • El proceso de duelo es distinto en cada persona. Debes aceptar la pérdida en tu propio tiempo.
Anuncio

Advertencias

  • No es necesario que afrontes la situación solo. Si necesitas ayuda, búscala (ya sea de familiares, amigos o consejeros).
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 5500 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio