El trabajo no es todo lo bueno que debería ser. Por supuesto, provee la comida de la mesa, la ropa que llevas puesta y paga el techo sobre tu cabeza, pero probablemente desearías que no fuese tan aburrido, agotador o simplemente repetitivo. Puede haber momentos en los que te sientas indispuesto, distraído o simplemente no estés del ánimo adecuado para esforzarte; sin embargo, a pesar de esto, debes aparentar que tienes interés y que sigues trabajando duro. Son aquellos momentos en los que necesitas una pequeña estrategia. Solo no recurras a ninguno de estos trucos muy seguido, ya que probablemente te descubran, te retrases en tu trabajo o te sientas como un holgazán (especialmente si empiezas a pensar en todas las personas que probablemente deseen tomar tu lugar).
Pasos
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Permanece siempre en la oficina durante las horas de trabajo. Al aparecer y al llegar a tiempo, habrás ganado la mitad de la batalla. Hay quienes le dan mucha importancia a las personas puntuales, ya sea que tengan una conducta productiva o no.
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Aparenta siempre que trabajas y que te concentras profundamente en tu trabajo. Esto significa que cuando no lo hagas realmente, la actitud debe ser la misma para que las personas asuman que trabajas.
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Mantén una expresión facial seria, de interés y de concentración. Esto ayudará a aparentar que te concentras en el trabajo.
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Escóndete detrás de un escritorio desordenado. No tengas muy limpio el escritorio. No obstante, mantén el espacio de tu oficina (como el de la superficie del escritorio) en un orden relativo. Trata de dar la impresión de que trabajas duro poniendo encima del escritorio unos papeles, unos documentos, unas carpetas abiertas, unos diccionarios, unos libros de trabajo, unos informes de asignación, etc. Por supuesto, debes tener cuidado de las personas negativas que insisten con que un escritorio desordenado es un signo de una mente desordenada; tal vez hayan descubierto tus tácticas.Anuncio
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Finge que eres el más ocupado. Muévete mucho, no permanezcas inactivo por mucho tiempo. Desplázate alrededor de vez en cuando para que parezca que piensas.
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Sé el tipo de persona que parece siempre ocupada por teléfono hablando con alguien o resolviendo situaciones difíciles. Recuerda que verse ocupado no es igual a hacer las cosas. Tener mucha actividad se ve importante y las personas productivas asumen que lo es. Además, una persona ocupada tiene una excusa para estar en un café (varios pisos abajo) haciendo algo, pero quién sabe qué.
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Debes estar en el lugar y en el momento correcto. Haz preguntas relacionadas al trabajo duro para que las personas te eviten activamente. Esto logrará darte el espacio que necesitas, ya que las personas te evitarán deliberadamente.
- Piensa en unas cuantas preguntas que suenen importantes con respecto a tu trabajo para que se las hagas a tu jefe o a tus colegas. Sigue así hasta que empiecen a decir excusas al verte venir.
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Actúa agobiado por la carga de trabajo. Cuando salgas, mantén un rostro triste para que las personas piensen que tienes problemas con la carga pesada de trabajo que llevas trágicamente. Retorcer las cejas regularmente puede ayudar.
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Acelera el ritmo. Si un colega que no es confiable visita tu oficina, empieza a trabajar más duro. Si no puedes hacerlo, derrama algo rápidamente y empieza a limpiarlo.Anuncio
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Traslada una pila de archivos, abre ruidosamente un archivador, deja caer un montón de papeles en el suelo y quéjate de "todo el trabajo que tienes pendiente".
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Haz sonar el teclado de vez en cuando para que parezca que trabajas. Incluso puedes usar una aplicación para que haga el ruido por ti.
- Ten cuidado de los sonidos de desplazamiento del ratón que puedan arruinar tu estratagema.
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Usa audífonos si planeas escuchar música, ver videos o jugar videojuegos. Eso hará que parezca que escuchas música mientras trabajas y te motivas a ti mismo.
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Respira profundamente. Inhala de manera profunda y ruidosa y exhala con la misma intensidad. Esto demuestra el estrés que “tienes que soportar”.Anuncio
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Mantén la pantalla en privado. Coloca tu monitor en una posición en la que solo tú puedas ver su contenido o en una posición que te dé el tiempo necesario para cerrar cualquier ventana y continuar trabajando si alguien pasa o entra a tu oficina.
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Usa programas que puedan restaurar rápidamente los documentos de trabajo. Pero ten cuidado, porque pueden hacer que alguien te sorprenda.Anuncio
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Toma descansos regulares. No omitirías los descansos si trabajaras realmente, así que no los omitas cuando finjas que trabajas.
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Haz el truco de Houdini. Lleva un saco o una chaqueta al trabajo. Cuelga el segundo saco o chaqueta sobre la silla para que cuando estés fuera del edificio en un almuerzo muy prolongado, parezca como si aún estuvieras en el edificio pero tan solo lejos de tu escritorio.
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Usa las salidas de incendio cuando entres y salgas del edificio. Asegúrate de que nunca te vean en el lobby.
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Asegúrate de quitarte de la cabeza los lentes de sol y otros objetos similares cuando regreses a la oficina. Estas son evidencias de que estuviste lejos de tu puesto de trabajo. Sin embargo, si tu trabajo tiene oficinas en otros edificios, entonces tienes una muy buena excusa.Anuncio
Consejos
- Cuando salgas de receso, cambia el escritorio de la computadora de vuelta a tu trabajo o al correo electrónico, por si tu jefe o alguien más revisa lo que haces.
- Usa lentes de lectura para que no luzcas sospechoso. Pon una cara de póquer para hacerte ver serio en tu trabajo.
- Coloca un espejo en tu cubículo que te permita ver si hay algún fisgón detrás de ti.
- Ten en cuenta los horarios de tu jefe y de los colegas cercanos. Esto te permitirá planear tu farsa con más efectividad. Por ejemplo, si sabes que el supervisor caminará cerca de tu escritorio a una hora determinada, puedes tomar las medidas necesarias para trabajar duro en ese momento.
- Escóndete en el baño cuando realmente necesites un descanso de todo. Si es posible, escoge uno de otro piso. De esta manera, si alguien tropieza contigo al salir, no sabrá o no le importará quién eres.
Advertencias
- Recuerda las consecuencias de no hacer tu trabajo. Si dejas de entregar una asignación importante, te pueden reprender, degradar o incluso despedir.
- Si la compañía monitorea tu computadora o tu uso del internet, tu farsa no pasará desapercibida por mucho tiempo si incluye perder el tiempo en juegos, navegar en el internet o actividades similares. Copia una gran cantidad de texto para cortar y pegar y cortar nuevamente en tu documento de texto. Al menos, dará la impresión de un pésimo borrador.
- Si tratas de fingir que trabajas más de lo que trabajas, busca un nuevo trabajo o reduce tus horas a medio tiempo. Sin embargo, puede haber un trabajador a medio tiempo que desee perder el tiempo en el trabajo. Tal persona no puede darse el lujo de perder el tiempo.